
Cecilia Richards se dijo satisfecha de haber “logrado” 3.551.093 millones de abortos de 2006 a la fecha, y alcanzar 321,384 sólo durante 2017.
“Irse es difícil, pero Plannet Parenthood nunca ha estado más fuerte, y sé que éste es el momento adecuado para hacer espacio para una nueva generación de líderes. Gracias a todos con los que he tenido el privilegio de trabajar y aprender de éstos últimos 12 años”, dijo.
Y agregó: “servir como presidenta de Planned Parenthood ha sido el honor de toda mi vida”, escribiría en su cuenta de Twitter el 30 de abril.
Richard dejó oficialmente su cargo en esa trasnacional abortista más grande del mundo, involucrada además en tráfico de órganos de niños no nacidos, cuyas imágenes sorprendieron al mundo entero por el horror visto en videos que mostró la forma de destruir a millones de inocentes.
Durante su gestión, Planned realizó un promedio de 320 mil abortos cada año.
No está claro qué planea hacer Richard en el futuro, pero ya publicó un libro de memorias titulado “Make Trouble”.
“Bajo el liderazgo de Cecilie Richard, 3,800.000 niños por nacer fueron destruidos por Planned Parenthood. Los derechos de los niños son también derechos humanos. Y ningún ‘derecho de las mujeres’ incluye el derecho a matar”, comentó al respecto Lila Rose, presidenta de la plataforma próvida estadounidense Live Action.
Ramona Treviño, exgerente de la trasnacional que renunció al enterarse por la prensa de que empleados del laboratorio estaban lastimando a las mujeres más que ayudándolas, reconoció: “estaba involucrada en una organización demoníaca. No hay otra palabra que puedas usar para lo que ocurre”, dijo a la agencia Aci prensa.
