El fantasma de Salaverna aparece en Asientos
Aguascalientes, Zacatecas y San Luis Potosí se encuentran seriamente afectados por la explotación minera, que lejos de aportar beneficios a la población, daña seriamente el entorno, en lo ambiental y social. Los problemas de salud crecen sin medida, la situación económica empeora cada vez y los ecocidios siguen uno tras otro.
De acuerdo a investigaciones de FUTURO, “Real de Asientos”, municipio fundado antes que la ciudad capital, vive ahora una etapa bien especial, donde se pone de relieve que 100 empleos mal pagados, “valen” la tala de 272 hectáreas y con ello el atentado al cerro emblemático del lugar, como lo pudimos constatar.
Con el pago de 177 mil 430 pesos y 16 centavos del predial 2017, se compra la impunidad en Asientos, lamentablemente con el consentimiento y a veces con el apoyo de la autoridad municipal, sin omitir la responsabilidad correspondiente a las instancias federales y estatales, resume Edgar Uriel Dávila Araiza, habitante del lugar.
Han sido comunes los problemas de salud, y todo por la ambición desmedida, dijo en la entrevista.
Paralelamente, se encuentran otros atentados a zonas supuestamente protegidas por normas internacionales, como lo es el Humedal, “El Jagüey”, cercano a Buenavista de Peñuelas.
En Zacatecas destaca la comunidad de Salaverna, en el municipio de Mazapil, donde se evidenció una serie de hechos que se sintetizan sencillamente en la destrucción violenta de ese emblemático pueblo del cual sólo quedan ruinas, recuerdos y algunas imágenes fotográficas, destacándose los vestigios de lo que alguna vez fue el templo, el centro de salud, las escuelas y su colorida plaza. La calidad de agua resulta increíblemente no apta para consumo humano.
Y este “fantasma” es el que se asoma ahora a las inmediaciones del municipio de Asientos; los daños están a flor de piel, baste observar la destrucción del simbólico cerro de “Altamira” que revela lo ocurrido en Salaverna como en San Luis Potosí con el “Cerro de San Pedro”, figura importante de su propio escudo.
Y es en San Luis Potosí donde estuvo operando la Minera “San Xavier”, que tras su cierre después de 30 juicios de distintos líderes de opinión dejó gran cantidad de desechos contaminantes y un enorme tajo reflejo de los 32 millones de litros de agua mezclada con 16 toneladas de cianuro, diariamente.
Las amenazas siempre estuvieron a la orden del día por los intereses políticos y económicos de inversionistas canadienses y del gobierno estatal, destacadamente con el panista Marcelo de los Santos y otros funcionarios de renombre que orillaron a familias desesperadas a consumir agua contaminada, igual que el aire.
A decir de los entrevistados, estos casos ponen en riesgo la salud y estabilidad de la sociedad, por lo que se espera la intervención inmediata de las autoridades respectivas de cada entidad.
Lo mínimo que deberán hacer es atender y entender al pueblo que dicen representar, con la suficiente sensibilidad y voluntad política acorde a estos magnos problemas, antes de que sea demasiado tarde y mueran más mexicanos, lo que los medios “tradicionales” ocultan por intereses no del todo desconocidos.
Mayor información en la edición impresa de FUTURO.